Finde largo con terror sobre la Ruta 40: pozos, riesgo y abandono

El movimiento del fin de semana largo volvió a dejar en evidencia el estado crítico de la Ruta Nacional 40 en el tramo entre Facundo y Los Tamariscos. Las imágenes que circularon muestran vehículos avanzando a paso de hombre, esquivando pozos de gran tamaño y transitando por un pavimento totalmente deteriorado. Quienes viajan describen la experiencia como “una odisea” y señalan que el estado de la calzada representa un riesgo permanente.

Los reclamos por la falta de mantenimiento no son nuevos. Vecinos, autoridades locales y automovilistas vienen denunciando desde hace años la necesidad de una intervención profunda y definitiva. La queja es unánime: los arreglos que se realizan son parches que no alcanzan y el problema vuelve a aparecer cada temporada, especialmente cuando aumenta el tránsito turístico.

En distintas oportunidades, desde organismos oficiales se anunciaron planes de reparación, licitaciones y trabajos de conservación del pavimento. Incluso se informó sobre producción de asfalto y operativos de bacheo en el tramo. Sin embargo, para quienes circulan por allí, la diferencia es mínima y el camino continúa igual o peor, con hundimientos, baches profundos y sectores completamente deformados.

Transportistas, familias y trabajadores que necesitan utilizar la ruta con frecuencia describen la situación como “desgastante”. No solo se deterioran los vehículos —con neumáticos rotos, llantas dañadas y suspensiones destruidas— sino que también se incrementan los tiempos de viaje y los riesgos de accidentes. Viajar de noche, coinciden, es prácticamente imposible.